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Diego Duarte, presente ahora y siempre

Se conmemoraron veinte años de la desaparición de Diego Duarte y para mantener vivo el recuerdo de Diego y continuar con el pedido justicia, la Asociación Civil que lleva su nombre realizó un festival en la organización juvenil “La Casa de Elena y Salvador”, en José León Suárez, el pasado viernes 15 de marzo.

El acto empezó a las seis y media de la tarde. El salón ya estaba preparado, los mates giraban y sobre una mesa se veían las remeras y bolsas de tela con el dibujo de Diego y el rezo “20 años, no estamos todos, falta Diego”. Frente a las sillas dispuestas se reproducía un video con fotos donde se mostraba el avance de la nueva plaza Diego Duarte de Costa Esperanza -el evento iba a realizarse en la plaza, pero por las cuestiones climáticas de los últimos días se cambio el lugar-. En uno de los costados se encontraba el tótem ecológico y a los pies la placa por Diego que va a quedar en la plaza. 

El evento contó con la presencia de Alicia y Paola Duarte, y del intendente del municipio, Fernando Moreira, quién habló al principio del mismo: “Este encuentro tiene como objetivo un pequeño homenaje a Diego Duarte para que el recuerdo se pueda transformar también en cuestiones concretas como la plaza. Lo que me parece más importante de todo es que en este encuentro hay distintas organizaciones juntas por un propósito tan importante como mantener viva la memoria, para contar un capítulo de la historia cercana de nuestra ciudad, para unirnos, para escucharnos, para estar más cerca que nunca en momentos difíciles y que nos permita seguir recorriendo esta etapa tan compleja”.

Luego Alicia, hermana de Diego, tomó la palabra y agradeció a todos los presentes por el apoyo y la compañía en ese día. Además, agradeció a las personas del equipo de obras públicas que la acompaño en su sueño de crear la Plaza Diego Duarte: “Este grupo, mi grupo, se puso este proyecto al hombro e incluso el corazón, me siento muy orgullosa desde el primer día en que empecé a hablar sobre este proyecto, de esta placita. Ahí estuvo este grupo que había convocado en la asociación. No quiero dejar de nombrar a la Cooperativa Bicentenario Construye que desde el primer día estuvo al pie del cañón”.

Emocionada Alicia agradeció a la sala y también a su “grupo de estudios de la Diplomatura en Reciclado, que estoy cursando también. Gracias por el gran esfuerzo, porque han escuchado mi deseo, no mi sueño. Cuando era chica me enseñaron que los sueños solo eran sueños, pero a lo largo de la vida Dios me enseñó que los sueños puestos en él se hacen realidad, y en estos veinte años de esta triste historia que me tocó vivir”.

Alicia recordó que un día entró al basural por necesidad, por el sustento de cada día de sus hijos y remarcó que “esa necesidad me llevó a aprender y me dieron el diploma, ese diploma de ciruja, ese diploma que nadie quiere agarrar, ese diploma lo tuve y aprendí. Aprendí lo que es reciclar en mi necesidad y de ese aprendizaje del reciclado pasé al dolor con la tragedia más grande que me pasó en mi vida, que fue la pérdida de Diego. Con 15 años ingresó al basural para poder comprar un par de zapatillas para poder ingresar al otro día a la escuela. Hoy recordando un poco ese último domingo de vida de mi hermano recuerdo que me decía ‘hoy es el último día que entró, es el último día porque yo mañana voy a la escuela’ , y para él era muy importante llegar ese primer día a la escuela… también quería comentarles estas palabras que me dijo Diego: ‘El lunes va a ser muy cargado para mí, porque el vecino Dani, me va a prestar una máquina de cortar pasto y yo voy a cortar ahí al costado y me va a tirar unas moneditas así que voy a tener plata’. Ese lugar que Diego iba a limpiar es hoy la placita recuperada por los vecinos”.  

“Diego nunca pudo llegar a la escuela, no pudo llegar a comprarse para las zapatillas, pero tampoco pudo llegar a limpiar ese lugar donde hoy está la plaza”.

Alicia contó emocionada, que vivió años de mucha tristeza: “El dolor paralizante me llegó y no me permitía avanzar en nada. Solo me iba a salvar tratar de hacer un trabajo colectivo. Creo que uno de los cuatro pilares fundamentales de esta construcción que he hecho ha sido el amor que me ha acompañado y la esperanza por saber la verdad. La lucha que comparto con muchas organizaciones y la justicia, la justicia social, que tanto necesitaba para llegar a estos veinte años. Esa justicia social llega, creo que el abrazo de todas las organizaciones sociales es muy importante en todo este camino, que todavía hay mucho por seguir, por eso en estos veinte años he tomado la palabra. Que brille la justicia, que a lo largo de estos veinte años ha hecho con acciones esta puesta en valor de esta plaza. Que brille la justicia, la memoria y la verdad”.

El recuerdo de Diego sigue y seguirá vigente, en la historia de San Martín, en la vida de Alicia y Paola, en cada pintada que lleve su nombre y ahora también en la placita de Costa Esperanza donde la placa siempre llevará su nombre.

Luego Paola, hermana de Alicia, leyó emocionada algunas palabras. “Hoy, 15 de marzo del 2024, se cumplen veinte años de que no estás presente físicamente entre nosotros porque decidieron arrebatarte lo más preciado, la vida. Decidieron que hoy no puedas estar. Decidieron que nosotros hoy no pudiéramos conocer al Diego hecho un hombre a sus 35 años, decidieron que nos quedemos con muchas preguntas que nunca te vamos a poder hacer. Decidieron que sólo nos quedemos con los recuerdos del Diego de 15 años, decidieron que nosotros, tu familia, sufriéramos tu ausencia. Tu pérdida tan grande nos va a acompañar por el resto de nuestras vidas. Decidieron que tus sobrinos no te conozcan, o que sólo te conozcan por tu ausencia o tu historia. Pero lo que no pudieron decidir es por nuestros sentimientos, ellos siguen intactos, fieles a tus recuerdos y seguirán por siempre. Tu nombre seguirá acompañándonos porque tu lucha pidiendo justicia es lo que nos mantiene”.

El cierre del aniversario por la desaparición de Diego Duarte estuvo de la mano de La Ferni, amiga y compañera de lucha de Alicia. La Ferni llegó con su guitarra y tras abrazar a Alicia y Paula agradeció “la lucha y el ejemplo hermoso”. Con el micrófono listo cantó Tarumba de Teresa Parodi y luego un tema que aprendió en sus años de militancia.

Antes de finalizar el evento, un grito se vuelve a escuchar en todas las gargantas como hace veinte años: ‘Diego presente, ahora y siempre’. Antes de irse los participantes abrazan a Alicia tras estos veinte años de lucha, el abrazo que sana y que acompaña el pedido de justicia.

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