El genocidio sionista contra el pueblo palestino no es un hecho aislado ni un “conflicto reciente”:…
Las estrategias de los clubes para sobrevivir
Los constantes aumentos en las tarifas de luz, gas y agua tienen en jaque al club 3 de Febrero, una institución que alberga a las familias de San Martín hace 86 años. La comisión directiva explica que la situación “es insostenible”. Las tarifas pasaron de menos de 10 mil pesos en 2015 a 180 mil pesos en la actualidad. Promesas incumplidas y una ley que falta reglamentar.
“En 2015 no llegaba a los 10 mil pesos lo que pagábamos en servicios, luz, gas y agua. Las tarifas actuales no tienen ningún tipo de subsidio y llegan a 180 mil pesos. Tenemos pileta, gimnasio, cancha de básquet y también para patinar. Nosotros somos una entidad sin fines de lucro, esto es terrible, todo lo que se recauda en el club, vuelve a la comunidad, tendríamos que estar pagando tarifas sociales, no como una empresa”, se queja Graciela Liberti de Lazzarof, presidenta del club.
Cabe destacar, que en 2015 el sistema bicameral votó por unanimidad la Ley nacional 27098 “Clubes de Barrios y de Pueblo” que todavía no fue reglamentada. La medida estipula que los clubes de barrio deben tener una tarifa social, acorde a la función que cumplen. Además, indica que el Estado debe asistir con recursos y docentes a estas entidades.
Hace un tiempo atrás, los clubes se unieron para intentar frenar los tarifazos, en defensa propia. En ese momento les dijeron que les iban a devolver el 40%, sin embargo esto funcionó solo unos pocos meses. Luego comenzaron a pagar los servicios como una empresa privada. Ahora se están organizando a través de la Confederación Nacional de Clubes de Barrios para que reglamenten la Ley 2681. Para ello cuentan con el apoyo del equipo jurídico de la Municipalidad, ya que el Estado Nacional pretende achicar la propuesta deportiva en todo el país.
“Recuerdo que en 2017 se nos rompió el globo con el que tapamos la pileta para poder hacer la temporada de invierno, el arreglo nos constó 3 millones de pesos, para juntarlo pedimos colaboración al municipio e hicimos distintas actividades en las cuales vendimos comidas y rifas. El intendente, Gabriel Katopodis, nos pagó todo el cerramiento que es de aluminio, nosotros cubrimos la obra civil. Recuerdo que para arreglar el techo del gimnasio que se llovía, hicimos una paella y les vendimos a unas 400 personas”, cuenta Liberti de Lazzarof.
“Las puertas de este lugar están abiertas e invitamos a que los funcionarios nos visiten cuando quieran para que vean el funcionamiento de nuestro club. Una vez recibimos la visita de la Secretaría de Deportes de la Nación, recuerdo que quedaron maravillados con el trabajo que realizamos”, asegura la presidenta.
Tras el último tarifazo la comisión directiva del club se juntó con los vecinos de San Martín para protestar.
“Todo lo que el club recauda, vuelve a la comunidad”
El club 3 de Febrero esta en el barrio San Andrés, funciona hace 86 años y esta ubicado en la calle Malvinas Argentinas 2681. Nació por la iniciativa de un grupo de chicos que querían jugar a la pelota y el esfuerzo de toda la comunidad en su conjunto. Es un lugar donde se comparten actividades deportivas en familia y es por eso que el común de los vecinos sienten la obligación de defender el espacio.
“Hacernos cargo de la administración es una manera de colaborar con la sociedad. Los clubes de barrio se manejan así, con dirigentes ad honorem. Brindamos nuestro tiempo para que la gente del partido tenga un lugar para disfrutar en familia. La idea es contener a los chicos, porque la situación no está bien para que estén en la calle: corren riesgo de caer en las drogas y el alcohol. El club es un lugar donde nuestros pibes pueden canalizar las ganas de hacer cosas”, explica.
“La personas que estamos a cargo venimos trabajando mucho, haciendo todos los días cosas para que el lugar este impecable y se puedan realizar distintas actividades. Es un orgullo para nosotros decir que la administración esta a cargo de los mismos socios. Como comisión directiva logramos mantener todo al día y eso nos da la fuerza para seguir adelante”, agrega Liberti de Lazzarof.
Todo lo que se recauda vuelve al club y a la comunidad. Hay instituciones que hicieron contratos de concesión de los espacios para poder seguir adelante. En lo que respecta al Club Atlético 3 de Febrero, han agotado instancias para autogestionarse, pero explican que ya no pueden seguir por los altos aumentos de las tarifas de los servicios.